¿Recuerdas lo complicado que solía ser trasladarse antes de Uber? Bastaba con pararte en la avenida más cercana y esperar hasta que llegara un taxi vacío para pedir el servicio.
Suena nada complicado; sin embargo, los problemas venían después cuando había que calcular el monto a pagar con taxímetro o sin él. Y no hablemos de la inseguridad que uno podía sentir al no saber con quién ibas.
Se trataba de problemas comunes, pero que con el auge tecnológico fueron resueltos gracias a la idea de dos hombres: Travis Kalanick y Garrett Camp.
Con cada problema, siempre hay una solución esperando
El comienzo de Uber se dio allá por 2008. Era una tarde fría y nevada en la ciudad de París, Francia, cuando Travis Kalanick y Garrett Camp, decidieron salir a conseguir un transporte para trasladarse.
Los minutos pasaban y los problemas para conseguir algún medio de transporte iban aumentando. El problema se agravó cuando Travis y Garret día no pudieron conseguir siquiera un simple taxi que los llevara a su destino.
Fue entonces cuando a ambos jóvenes se les ocurrió una idea: presionar un sólo botón para conseguir transporte.
Fue así que bajo esa simple idea fundaron en 2009 Uber, pero bajo el nombre de UberCab. La primera versión de la app, que actualmente es conocida como el prototipo o una versión beta, fue desarrollada por Garrett Camp, Oscar Salazar y Conrad Whelan.
Uber y su consolidación
Aunque hoy en día puedes tomar un Uber por menos de 40 pesos (2 dólares), originalmente la empresa se había creado como una app para pedir autos premium en algunas áreas de San Francisco, Estados Unidos. Claro que esto hacía que el servicio se volviera costoso.
A pesar del precio, la pequeña compañía comenzó a generar suficientes ingresos hasta que en 2011, sólo tres años después de su fundación, se tomó la decisión de cambiar el nombre a sólo Uber.
Todo iba bien. El 2011 se convirtió en un año positivo pues significó la consolidación de la empresa en todo San Francisco, esto a pesar de ser un servicio más costoso al taxi común.
Ese mismo año la compañía alcanzó un valor de 60 millones de dólares luego de varias inversiones de personas interesadas en el proyecto. También se logra la internacionalización con su incursión en Francia, todo gracias a una una inversión de Jeff Bezos (fundador de Amazon).
El 2011 también significó para Uber su salida de San Francisco para llegar a una de sus ciudades más lucrativas, Nueva York.
El ‘boom’ de Uber
Ya con una empresa sólida, Uber decide sacar en julio de 2012 su innovador servicio Uber X, un proyecto de transporte a bajo costo que permitía a las personas conducir bajo el nombre de la empresa con su propio auto.
Fue con la llegada de Uber X que comenzó el éxito. En 2013 la compañía inauguró sus servicios en India y algunas ciudades de África, logrando así una presencia en 35 ciudades alrededor del mundo.
Ese mismo año, se recibió una inversión de 258 millones de dólares por parte de Google Ventures, hecho que ayudó a que Uber cerrara el año con un valor de 3 mil 760 millones de dólares.
El éxito no es eterno
Todo iba de maravilla en la empresa de Travis y Garrett, pero la suerte cambió a partir del segundo semestre de 2015, comenzando con una de las protestas más violentas contra la compañía a finales de junio en Francia, en la que taxistas y otros que apoyaban su causa bloquearon calles, quemaron objetos y atacaron a supuestos conductores de Uber.
La mala racha continuó cuando su competidor más fuerte en China, Didi Chuxing, logró doblar su valor y alcance de Uber. Este conflicto terminaría en julio de 2016 cuando la compañía Didi, logró las 400 ciudades en el país asiático, mientras que Uber apenas llegaba a las 100, por lo que finalmente Uber llegó a un acuerdo con Didi y cedió el mercado.
Un año después, en mayo de 2016 Uber y Lyft (la mayor competidora en Estados Unidos), recibieron un duro golpe al ser expulsados de la ciudad de Austin, Texas, luego de que se aprobara una medida contra ambas empresas como consecuencia de las protestas y votos de una gran parte de los ciudadanos.
Dos meses más tarde, Uber también fue expulsada de Hungría luego de que una legislación gubernamental hiciera imposible para la compañía continuar con sus servicios. Por si todo esto fuera poco, Uber cerró 2016 con una pérdida de dos mil ochocientos millones de dólares.
A pesar de los golpes, Uber supo mantenerse como la mayor empresa de transporte tecnológico y en pleno 2019 comenzará a vender acciones en la bolsa de valores de Nueva York con miras a los US$100 mil millones de dólares, en la que sería una de las mayores ofertas iniciales en la historia del NYSE.
El financiamiento, un aliado importante de Uber
En sus 12 años de historia, Uber ha logrado posicionarse como una marca multimillonaria a nivel mundial. Pero esto no lo ha logrado sólo con ahorros. A lo largo de su historia Uber ha recibido importantes financiamientos de parte de empresas y personas que han creído en la marca.
El primer préstamo se dió en 2010 cuando la compañía recibió un millón 250 mil dólares en financiamiento, tan sólo un año después de haber sido fundada. En 2012, la cifra se multiplicaría increíblemente, superando los 44 millones de dólares.
Para 2013 la compañía recibió un financiamiento de 258 millones de Google Ventures. Un año más parte recibiría financiamiento (de monto desconocido) de la compañía Baidu, la marca de cartografía número uno en China, y Uber comenzaría a usar sus aplicaciones en el territorio chino como parte del trato.
En junio de 2016 Uber recibió el que ha sido, hasta ahora, su mayor financiamiento por parte de la Inversión Pública de Arabia Saudita, por un monto de 3 mil 500 millones de dólares.
En total, se estima que Uber ha recibido un financiamiento de 12 mil millones de dólares a lo largo de sus años de existencia. Pero lejos de verse como una deuda ‘impagable’, la empresa supo capitalizar cada centavo para crecer al máximo y hacer que hoy en día sea considerada una de las empresas más exitosas del Siglo XXI.