Cada una de las marcas más icónicas de nuestros tiempos cuentan con algún logotipo que sirve para identificarlas sin siquiera tener que leer su nombre. Una de esas marcas es Adidas, empresa alemana fundada en 1948 por Adolf Dassler y que ha tenido en tres simples líneas su distintivo por décadas.
Sin siquiera tener la necesidad de poner su logo completo, Adidas tiene prendas, calzados y accesorios ilustrados sólo con sus tres bandas distintivas y aún con esa sencillez podríamos asegurar que la mayoría de los consumidores saben de qué marca se trata.
Como ya te podrás haber dado cuenta, los logotipos son algo fundamental para las marcas a tal grado que podríamos preguntar: ¿te imaginas a Adidas sin sus tres líneas?
Adidas pierde la patente de sus tres líneas
A pesar de la importancia que las tres bandas tienen para Adidas, el pasado jueves la icónica marca deportiva dio la noticia al haber perdido una batalla legal ante el Tribunal General de la Unión Europea.
En un intento de Adidas por darle una mayor protección a su emblemático logotipo, la sentencia terminó siendo contraproducente.
El organismo de la UE sentenció que las “tres líneas” no tienen un «carácter distintivo» que sustente su uso protegido y en exclusiva. Esta decisión fue informada a la Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea (EUIPO), misma que en 2016 comenzó la anulación del registro de la marca tras un reclamo de la empresa belga de zapatos Shoe Branding Europe BVBA.
¿Por qué perdió el juicio Adidas?
En su sentencia, el Tribunal General de la Unión Europea da la razón a la EUIPO alegando que las tres líneas no se tratan de una “marca de patrón”, sino de una “marca figurativa ordinaria”.
Asimismo, el Tribunal detalló que Adidas sólo aportó pruebas sobre el uso adquirido en cinco países de la Unión, por lo que no tendría sentido extenderlo al conjunto de la Unión Europea.
¿Qué dice Adidas de la sentencia?
Sobre la decisión del máximo Tribunal, el gigante alemán aseguró a través de un comunicado sentirse «decepcionada».
Aunque aún tiene dos meses para apelar la decisión, Adidas sostuvo que la decisión se limita a «una ejecución particular» del diseño de las tres rayas, por lo que el fallo no tiene impacto sobre otros usos protegidos de la marca en Europa, sin especificar a qué usos se refería.
¿Qué debe saber tu Pyme sobre propiedad intelectual?
Luego de haber leído el caso de Adidas, ya te habrás dado cuenta que los derechos de propiedad intelectual son, en la actualidad, un elemento muy importante a tener en cuenta por las pequeñas y medianas empresas (Pymes), sobre todo para las que se dedican a la exportación de cualquier tipo de servicio o bien.
Simplemente, el hecho de que una empresa genere algún tipo de innovación, desarrollo o proceso novedoso es motivo suficiente para que su rival comercial busque copiar y replicar las ideas; por ello es necesario que, antes de cualquier cosa consideres registrar desde tu marca, hasta tus productos.
Recuerda que no hacerlo abre las puertas a que otras empresas puedan aprovechar todo el esfuerzo que la Pyme haya puesto en el desarrollo de esta nueva idea.
El caso de la ‘Manteconcha’
Un ejemplo muy peculiar sobre la importancia del registro de propiedad intelectual se dio en México en 2018.
Todo comenzó en una pequeña panadería de Querétaro. Como suele pasar con algunos de los mejores inventos de la humanidad, el panadero Josué Rivera creó por accidente el dulce de la temporada: la Manteconcha.
Con ganas de innovar, este empresario y panadero mexicano buscó hacer un pan dulce diferente que fuera mitad mantecada esponjosa y mitad concha dulce. El resultado fue un pan que logró enamorar a los consumidores locales y hasta a millones más a través de las redes sociales.
Lo que empezó como una simple idea, terminó siendo un éxito que generaba largas colas de consumidores ansiosos de comprar este pan. Sin embargo, mientras el éxito aumentaba gracias a la viralización en redes sociales, los verdaderos problemas comenzarían a llegar para este panadero mexicano.
La pelea por la ‘Manteconcha’
En menos de un mes se presentaron ante el Instituto de Propiedad Intelectual de México (IMPI) tres solicitudes para registrar la marca ‘Manteconcha’ como propia. Entre las empresas que quisieron aprovecharse del éxito fueron Grupo Bimbo, que el 17 de agosto pidió registrar a su nombre la marca para fabricar pan, galletas, pasteles y preparaciones de cereales.
Sin embargo, luego de las presiones contra esa marca en redes sociales, Bimbo decidió mejor retirar su petición ante el IMPI asegurando que buscaba «evitar interpretaciones equivocadas».
Otro de los aprovechados que quisieron tomar el éxito de la Manteconcha fue un individuo llamado Óscar José Méndez, residente en Tlanepantla, Estado de México, quién presentó un logotipo para la marca y solicitó al IMPI tener los derechos para hacer pan de muerto, panecillos, pan molido, de jengibre y sin gluten.
De la misma forma, el usuario León Facovich de Huixquilucan, Estado de México, quiso registrar de inmediato la marca para además de pan y derivados, vender café, té helado y tapioca. Ninguno de esos tres primeros intentos por adueñarse del producto había sido de cerca el creador de la idea.
Aprende de los errores de otros
Aunque Josué Rivera logró quedarse con su panecillo, de no haber sido por el reclamo de los usuarios en redes sociales puede que el resultado hubiera sido otro para este empresario.
Recuerda que casi todos los países del mundo cuentan con normas domésticas que regulan la propiedad intelectual. Estas leyes suelen establecer, además, los procedimientos necesarios para obtener las patentes, las marcas o los derechos de autor.
Por lo general, es necesario cumplir con un trámite administrativo en el que se describe el activo intangible que se desea proteger, para que luego el Estado lo registre y lo haga público, pero de eso hablaremos más a profundidad en otro post.