Una terminal punto de venta es un dispositivo electrónico que permite a los negocios aceptar pagos con tarjeta de débito, crédito o vales electrónicos de forma presencial. Las TPV procesan transacciones de manera segura y rápida, conectándose con bancos o procesadores de pago para autorizar los cobros.
En México el uso de TPV se ha incrementado debido a la creciente demanda de pagos digitales. En 2023 había más de 2.6 millones de terminales activas en el país, un aumento del 13% respecto al año anterior, según datos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
Este tipo de herramienta es especialmente útil para comercios físicos, consultorios, restaurantes y otros negocios que buscan agilizar sus procesos de cobro, ofrecer mejores experiencias al cliente y registrar cada venta de forma automática.
Además de facilitar las ventas presenciales, algunas terminales también permiten generar links de pago, cobros a distancia o integrarse con sistemas de administración, lo que las convierte en un recurso estratégico para mejorar la eficiencia operativa y el control financiero de las empresas.
