Restaurantes podrían reabrir en CDMX pese a semáforo rojo

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Restaurantes podrían reabrir en CDMX pese a semáforo rojo

Luego de llevarse a cabo dos mesas de trabajo entre empresarios del sector restaurantero y autoridades del Gobierno de la CDMX, se dio a conocer un pre-acuerdo para que miles de restaurantes puedan abrir su negocio a partir del próximo lunes pese al semáforo rojo.

¿Cómo operarían los restaurantes en la CDMX?

De acuerdo con el diario El Universal, los restaurantes podrán operar a partir del lunes 18 de enero bajo un modelo mixto (servicio presencial y de comida para llevar por las tardes), todo impulsado por el uso de terrazas y espacios abiertos.

Con “estrictas” medidas, que deberán respetar íntegramente, los negocios de restaurantes podrán operar de martes a domingo, con un aforo de 25% en espacios cerrados y de 35% en terrazas, con cierre el lunes y sin música. Los horarios serán hasta las 18:00 horas, y después de esa hora solo se podrá dar servicio para llevar.

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Fue en el punto del horario donde más debate hubo pues el Gobierno capitalino pretendía que la atención fuera hasta las 16:00 horas. Sin embargo, la petición de las autoridades no fue considerada luego de que los empresarios argumentaron que “ese horario es inviable, porque elimina las comidas, dado que culturalmente el comensal mexicano llega a comer entre 15:30 y 16:30 horas”, lo cual en nada los ayudaba.

Otra condición para que un restaurante pueda operar es la obligación de trabajar en coordinación con las alcaldías, para que faciliten que los negocios que no cuenten con terraza, puedan atender en la banqueta.

También se pedirá que en cada mesa no haya más de cuatro personas, por lo que aplicará el protocolo de “Mesa Segura”; también se deberá reinstalar el uso sistemático del código QR, muestreo de empleados semanal al 5% de la planilla, con pruebas Covid-19 en negocios con más de 50 trabajadores.

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En caso de que la CDMX salga del semáforo rojo, pero por un alza en el número de contagios se deba regresar, restaurantes prometieron medidas inmediatas para el apoyo en la disminución de casos.

“De forma permanente cada vez que la Ciudad de México tenga que regresar a semáforo rojo, la apertura será con un aforo del 25% en interiores y 35% en terrazas y mesas al exterior”, señala El Universal.

En caso de que las circunstancias mejoren y la Ciudad de México pueda regresar a semáforo naranja, los restauranteros propusieron regresar a las condiciones de operación publicadas en la Gaceta Oficial de la capital, como: aforo del 30% interiores y 40% exteriores; horario de cierre hasta las 23:00 horas; música viva, grabada y videograbada, con un límite máximo de volumen de 62 dB; y seis comensales por mesa, entre otras medidas.

¿Cuánto ha afectado la pandemia a los restaurantes?

Bajo el reclamo “abrir o morir”, más de 900 dueños de restaurantes exigieron en los últimos días a las autoridades del Estado de México y de la CDMX el cese del semáforo rojo, que ha suspendido el grueso de las actividades económicas.

Recordemos que las autoridades de la zona metropolitana decidieron endurecer las medidas contra la pandemia el pasado 18 de diciembre en plena escalada de la epidemia y ante el riesgo de que los hospitales se saturaran.

Sin embargo, esta decisión fue criticada por empresarios del sector restaurantero quienes advirtieron que el nuevo “parón” de las actividades ha ocasionado que más de 13 mil 500 locales hayan cerrado, poniendo en riesgo más de 450 mil empleos.

El problema se da en el alto número de contagios que tiene tanto el Edomex como la CDMX. Solo en la capital se acumulan más de 348 mil casos confirmados y se tiene registro de 22 mil 623 defunciones, según los últimos datos oficiales disponibles.

El otro lado de la historia lo viven los cientos de dueños de pequeños y medianos restaurantes que, pese a que el sector es considerado esencial, han tenido que limitarse a ofrecer servicio a domicilio y cuando se reanudaron las actividades económicas en el verano pasado solo pudieron abrir al 30% de su capacidad, lo que dificultó que muchos locales pudieran absorber los costos.

Los restauranteros señalan que su patrimonio está en riesgo, así como miles de empleos y lo peor, según su reclamo, es que las condiciones impuestas no son sostenibles en el horizonte de que la pandemia se prolongue por más tiempo.

“Se trata de proteger la economía y la salud de forma equilibrada”, aseguran los restauranteros.

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