Cuidado, información extraoficial. Considérenlo como un pensamiento al aire que pueden leer y botar.
El origen de las promociones y ofertas radica en el deseo vertiginoso de las empresas de cumplir dos objetivos: 1) Vender todo lo que no han vendido. 2) Dar a conocer un nuevo producto para venderlo.
A final de cuentas lo que se busca es el bienestar de la empresa. Al darte una promoción no es que estén siendo bien buena onda y quieran ayudarte a ahorrarte una lanita. No te confundas. Si ponen en promoción algo es porque se les está acumulando en el almacén y les sale más caro descartarlo por ellos mismos que darlo más barato.
El porcentaje tan amplio de ganancia en los productos les permite tomar estas medidas de economía saludable. Termina lo que produces y produce más. Ley de negocios.
Y si te dedicas a los negocios seguramente ya te sabes todas estas artimañas. Tú puedes dejar de leer aquí. Si no, síguele.
¿Cuántas veces no nos hemos topado con un 90% de descuento en algo o liquidación por cierre? Aquí hay que considerar dos puntos: la necesidad y la oportunidad.
Si lo necesitas, si es algo que ya estabas buscando y de repente te lo encuentras en oferta, ¡felicidades! Es tu día de suerte, no dudes en comprarlo.
Pero si lo haces porque la oportunidad te salió, ¡cuidado! Seguramente no lo necesitas hoy ni mañana y será un gasto innecesario para tu bolsillo.
Cuida tu cartera, no seas ingenuo y compra lo que necesitas, no lo que te sale en oportunidad.