¿El horario de verano es positivo o afecta a las empresas?

El cambio de horario de verano 2019 regresó, haciendo que millones de mexicanos tuvieran que adelantar su reloj una hora antes de irse a dormir el domingo 7 de abril.

Aunque a muchos puede molestar esta acción, algunos estados como Sonora, Baja California y Quintana Roo se salvan de aplicar la medida que tiene su justificación en mantener el medio ambiente.

¿Por qué tenemos horario de verano?

Bueno, el horario de verano nace gracias al entomólogo neozelandés George Hudson quien fue el primero en proponer formalmente un cambio de horario.

La medida data de 1895, cuando el aficionado de los insectos presentó un ensayo a la Sociedad Filosófica de Wellington donde planteaba un cambio de dos horas en los horarios con el objetivo de aprovechar mejor la luz solar.

Pero George Hudson no fue el único en apoyar la idea. Como él, hubo otros científicos en Inglaterra y Estados Unidos que pidieron algo similar, pero no fue sino hasta años después que se adoptaría el modelo. La primera ciudad en aplicar el cambio de horario fue Port Arthur, Ontario en 1908.

¿El horario de verano beneficia en algo a las empresas?

Los efectos del cambio de horario han sido estudiados por años en diversas partes del mundo, pero aún hay muchas dudas sobre el costo/beneficio de esta medida.

Para el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX), Jaime Chalita Zarur, la medida es indistinta para las empresas al no tener beneficio alguno comprobado.

“Es indistinto si es eliminado o no el horario de verano, pues aunque el objetivo de éste es que hubiera un ahorro de energía traducido en un bienestar para las casas y las industrias, la realidad es que en ninguna de las dos se ha cumplido dicho cometido”, dijo Jaime Chalita Zarur.

Jaime Zarur señala que aún cuando se reduce el uso de energía con la medida, de todos modos la industria sufre un impacto de entre el 30 y 70% con las alzas a las tarifas de luz en las empresas, sobre todo ahora con los aumentos que se vienen dando desde el año pasado.

“Los ahorros están por verse, porque de mi parte no los conozco, sólo lo que han publicado los gobiernos federales, la realidad es que el consumo aun cuando lo reducimos nos impacta muchísimo, sobre todo porque desde el año pasado nos impusieron aumentos de un momento a otro”, asegura Jaime Zarur.

A esa crítica se suma el dirigente de la Asociación Vinculación PYME, Jorge Carreño Leuras, quien dice que la implementación del cambio de horario no se ha reflejado en una mejor economía para el país y en muchos de los casos el horario de verano crea más problemas y mayor utilización de la energía.

Claro que a todo esto tenemos que añadir las alteraciones del sueño, cambios en el estado de ánimo y peor rendimiento intelectual y físico que sufren las personas con el horario de verano, sobre todo adultos mayores y los niños pequeños.

Con las críticas que nacen de esta medida desde hace años podemos ver que en varios sectores del país y el mundo, la práctica del horario de verano comienza a tener más rechazo que aceptación, abriendo así un debate en torno a qué tantos beneficios puede o no traer cambiar de horario tanto a los ciudadanos, como a las empresas.